Durante estas primeras semanas del año saltaron las alarmas debido a la aparición de fallos de seguridad en los procesadores Intel, que además de Microsoft afecta a otras empresas como AMD o ARM.Ha salido a la luz que una notable parte de los procesadores Intel fabricados tanto para ordenadores y teléfonos móviles como para otros dispositivos, tienen un grave fallo de programación. Se estima que pueda estar afectando a millones de procesadores distribuidos en la última década. Aunque eso si, parece que solo a los procesadores de 64 bits, estando los de 32 bits más antiguos, a salvo del problema.
Este fallo de los procesadores ya está empezando a ser considerado como uno de los errores más graves en la historia de la informática debido a su alcance. Tal fallo se traduce en un agujero de seguridad a través del cual podría llevarse a cabo el robo de información sensible como contraseñas y cuentas de usuario a través de ciberataques. Dichas vulnerabilidades han sido denominadas como Meltdown y Spectre. Debido a que no es posible solucionarlo con una actualización del fabricante, han de ser Microsoft, Google y Apple los encargados de lanzar las actualizaciones de seguridad en sus respectivos sistemas operativos.
También se estima que debido a los cambios requeridos para solucionar estas vulnerabilidades, los equipos podrán perder entre un 5 y un 30% de su rendimiento, aunque desde Intel comienzan a asegurar que realmente no será algo significativo.
Microsoft ya ha lanzado una actualización de emergencia para proteger a los equipos con Windows 10, pero durante esta semana se espera que el 90% de los procesadores